Cuando proyectamos nuestra consciencia aquello que percibimos no está limitado por el tiempo, por el espacio, e incluso por las sensaciones.
Por ejemplo cuando proyectamos nuestra consciencia no "vemos" en una sola dirección, tal y como estamos acostumbrados, sino que "vemos" en todas las direcciones al mismo tiempo. Es como si no tuviésemos una sensación de "estar" sino la sensación de participación, o de "ser".
Las percepciones obtenidas por una proyección de consciencia están unificadas, pero nosotros las podemos interpretar según nuestros propios esquemas mentales.
Si una persona cree que la proyección de la consciencia, porque así lo establecen sus cánones mentales, se produce como si fuese una separación del cuerpo astral que se desprende del cuerpo físico, y que ve a otros lugares donde ve lo que acontece, entonces la persona lo percibirá de esa manera.
Eso no quiere decir que suceda de esta manera, porque, entre otras cosas, el cuerpo astral no se desprende del cuerpo físico sino que se expande, pero nosotros lo interpretamos de esa forma ya que lo que se encuentra en nuestros esquemas mentales es lo que se manifiesta.
Hay que comprender que el sentir como si el cuerpo astral saliera de nosotros, flotara, se alejara, etc. cuando se hace una proyección de la consciencia, es solamente una de las muchas posibilidades de como se pueden percibir las sensaciones durante la experiencia, o sea que: LA MENTE ES LA QUE ASIGNA DIMENSIÓN A LAS COSAS.
FALSOS CONCEPTOS
Comenzaremos pues con el trabajo de eliminación de falsos conceptos sobre la experiencia de la proyección de la consciencia.
Uno de los falsos conceptos que existen sobre la proyección de la consciencia es creer que cuando se realiza la experiencia, el cuerpo astral se desprende de nosotros y viaja a grandes distancias. El concepto del espacio, como tal, es una realidad solamente física que, incluso en dicho plano, es relativa a la velocidad de la luz, como lo demostró Einstein en la teoría de la relatividad.
El espacio en el plano astral no existe como tal ya que, en el mismo, todo es unidad y continuidad, no habiendo separación. Por ello, cuando se realiza una proyección de la consciencia, en la cual interviene el cuerpo astral, este no sale a ningún sitio, solamente se toma consciencia de las realidades que el cuerpo psíquico es capaz de captar en su propio nivel.
El falso concepto de que el cuerpo astral sale del cuerpo psíquico y viaja a tiempos y lugares lejanos indica que los que propalan dicha idea no tienen claros conceptos de metafísica básica. Al mismo tiempo afirman, con un claro desconocimiento de lo que sucede en realidad, que al realizar el viaje astral, o sea la proyección de la consciencia, es peligroso porque se puede partir el cordón de plata y se podría fallecer en la experiencia.
Ese concepto es absolutamente falso, y eso lo saben muy bien los verdaderos esoteristas, ya que una persona solo fallece cuando, de acuerdo con la ley cósmica del karma, se produce la circunstancia prevista por el karma básico de la persona para el fallecimiento.
De acuerdo con la ley del karma, dentro de las lecciones y experiencias a aprender, se encuentra la CIRCUNSTANCIA PRECISA que ha de producir el tránsito de la consciencia al plano espiritual, o muerte según denominan los profanos.
Otra de las falsas teorías, es la de que el cuerpo astral, cuando se encuentra en proyección de la consciencia, puede ser atacado por los llamados "bajos astrales" o espíritus inferiores que se encuentran en el mundo espiritual.
Esta idea falsa presupone que hay cierto tipo de "almas inferiores" en el "mundo astral" que se alimentan de la energía del cuerpo astral de los seres humanos y que aprovechan los "viajes astrales" para atacar al cuerpo astral, tratar de apoderarse de él, y alimentarse con su energía.
El alma es única, universal, unitaria, y cada sección de la misma, bien sea que dé vida a un ser humano, a una planta, o a un animal, es divina en esencia y no puede bajo ningún concepto, insuflar, inspirar, armonizar nada que sea de naturaleza elevada, ya que ese es el plano al que pertenecen: el plano del espíritu, el plano de la perfección.
Otra de las supersticiones propaladas es que cuando el cuerpo astral sale del cuerpo físico, cualquier "entidad negativa" podría introducirse en el mismo y producir un fenómeno de posesión.
Como ya dijimos, el cuerpo astral no sale de nosotros, y mucho menos, ninguna entidad extraña a nosotros nos puede "poseer" anulando nuestra alma. Esta teoría insensata surge de lo que algunas sectas religiosas afirman que el diablo está en lucha con Dios para posesionarse de las almas de los hombres. Es curioso que esas sectas, que dicen creer en un Dios todopoderoso y bondadoso, le conceden más fuerza al diablo que al mismo Dios.
Pensar que todo ha sido creado por Dios, y que hay algo que pueda ser más fuerte que Dios, y que tenga alguna posibilidad de éxito en contra de Dios, es cuanto menos, una de las mayores estupideces que pueda tener cualquier creyente.
Hacemos todas estas explicaciones para que eliminen por completo cualquier tipo de temor que puedan tener sobre la experiencia de la proyección de la consciencia. Es precisamente el temor y la duda lo que les puede impedir realizarla con éxito.
Piensen que la proyección de la consciencia es una facultad tan natural como lo pueda ser ver, oír, tocar, etc. y que corresponde al ser humano el disfrutar por completo de las maravillosas posibilidades que se le brindan con la facultad de proyectar su consciencia.
SINTONIZACIÓN DE LOS CUERPOS DEL SER HUMANO
El siguiente paso en nuestro proceso de preparación para la proyección psíquica es el de la sintonización de los cuerpos del ser humano.
Teniendo en cuenta que los diferentes cuerpos del ser humano son, en última instancia, condiciones vibratorias, que tienen sus propias tasas energéticas, una de las maneras de conseguir su sintonización es, además de la meditación diaria, el producir una vibración que sea armoniosa con todos ellos.
Existen sonidos místicos de poder que producen condiciones vibratorios que nos armonizan con nosotros mismos, y con nuestros alrededores. Estos sonidos místicos tienen una cualidad vibratoria básica que permite producir ciertos efectos no sólo en nuestro cuerpo, sistema nervioso, cerebro o glándulas endocrinas, sino que armonizan nuestro aura, el cuerpo astral, y las otras condiciones espirituales internas.
Recuerden el poder que tiene la palabra, el sonido y la vibración, hasta tal punto que todas las tradiciones nos hablan del Verbo Creador. Dentro de la facultad de la palabra, los sonidos básicos que puede pronunciar el ser humano son las llamadas vocales.
Hay tres vocales fundamentales, de las cuales surgen todas las demás. Precisamente esas vocales dan origen a cuatro vocales más, utilizándose las siete vocales simples en casi todos los idiomas, aunque hay la posibilidad de pronunciar hasta doce vocales, las cuales son producidas por sonidos intermedios entre las tres fundamentales o las siete vocales simples.
Hay idiomas que sólo utilizan cinco vocales: como el castellano; pero hay otras lenguas, como el francés o alemán, que utilizan más.
Las tres vocales fundamentales son: A, U, I. La A es gutural; la U es labial y la I es dental.
La combinación de ambas dan otras tres vocales secundarias, y una de equilibrio, lo que corresponde a la ley del triángulo: TRES
FUNDAMENTALES, TRES SECUNDARIAS Y UNA DE EQUILIBRIO. Simbolizado todo ello por los dos triángulos que se entrelazan, y el punto en el medio.
La unión del sonido A, con el U, produce la vocal O.
La unión del sonido A, con el I, produce la vocal E.
La unión del sonido U, con el I, produce la vocal Ú, que es un sonido intermedio entre U e I, y se pronuncia bien en francés y alemán. El sonido que les equilibra es Ü.
En lo que concierne a la sintonización de los cuerpos del ser humano, el sonido U, sintoniza al físico, al mental y emocional; el A sintoniza al cuerpo astral, al causal y al cuerpo glorioso (espiritual); y el sonido I con los cuerpos superiores.
Las otras vocales tienen efectos particulares sobre cada uno de los cuerpos en concreto.
A continuación daremos un ejercicio de armonización:
EJERCICIO Nº 1:
Iremos a algún lugar en donde podamos estar a solas y de pié, y con la habitación a oscuras, antes de irnos a dormir, elevaremos nuestros brazos por encima de nuestra cabeza, con las palmas de las manos mirándose, pero sin tocarse, pronunciaremos SIETE VECES muy suavemente, como si cantásemos, las vocales U, A, I.
La pronunciación de las vocales será de unos nueve segundos cada vez; tres segundos por vocal, así: UUU AAA III.
Después de haber pronunciado las vocales siete veces, nos sentaremos y procederemos a un período de meditación de unos diez minutos.
En ese período de meditación procuren dejar su mente inactiva, no traten de analizar las impresiones, los pensamientos o las sensaciones que lleguen a Vds.
Cuando hayan terminado el período de meditación pueden analizar esas sensaciones que tuvieron, pero no lo hagan antes porque su pensamiento se desviaría y la experiencia se acabaría entonces.
Conviene hacer este ejercicio durante una semana.
Todos los sentimientos o percepciones que hayan podido tener son debidos al ajuste y entonamiento entre todos los cuerpos del Ser. Otros puede que no hayan notado nada en particular, pero eso no quiere decir que no hayan tenido resultados, todo lo contrario: eso significa que el entonamiento se ha producido de una manera suave y natural por lo que no tenían por qué sentir nada en especial.
Ahora, teniendo una comprensión más amplia de lo que es la proyección de la consciencia, y habiendo podido eliminar algunos de los falsos conceptos que podían pensar que formaban parte del fenómeno en si, procederemos a experimentar y a reconocer más sobre la facultad de proyectar nuestra mente.
El siguiente ejercicio es conveniente realizarlo en una habitación donde podamos estar a solas y en paz y no tener el estómago cargado, por haber comido hace poco, ya que en ese caso el cuerpo físico es el que tiene la mayor parte del control por las necesidades básicas que tiene de asimilar la comida por el proceso de digestión.
Es muy conveniente que nos encontremos cómodos y ligeros en cuanto a no sentir la pesadez de la digestión, así mismo es adecuado que llevemos ropas cómodas que no estén apretadas, a fin de no sentir una incomodidad por parte del cuerpo físico.
EJERCICIO Nº 2:
Una vez que estemos preparados para el experimento, nos sentaremos cómodamente en la habitación, preferentemente a oscuras, o con una luz suave que no nos moleste.
Ahora procederemos a hacer una relajación, para lo cual podemos hacer el ejercicio del avivamiento de la consciencia, es decir: sentir las diferentes partes del cuerpo, mientras que las vamos relajando progresivamente, hasta que todo el cuerpo se encuentra relajado y cómodo y nuestra mente esté apaciguada y serena.
Una vez relajados, haremos tres respiraciones profundas, aguantando el aire en nuestros pulmones tanto tiempo como nos sea cómodo. Luego tomaremos una respiración profunda, y pronunciaremos suavemente la vocal A, mientras soltamos el aire. Lo haremos como si cantásemos la vocal A durante todo el tiempo que está saliendo el aire de nuestros pulmones, el sonido resultante sería algo así como: AAAAAAAAAAA.
Cuando estemos soltando el aire y pronunciando la vocal A, la cual armoniza con el cuerpo psíquico, procuraremos sentir como si nuestro aire y la vocal A se proyectasen fuera de nosotros y debemos pensar, y sentir, que nuestra consciencia se proyecta con nuestro aliento y con el sonido de la vocal A.
Repitan la pronunciación de la vocal A siete veces, luego permanezcan relajados y cómodos unos minutos.
Si al pronunciar la vocal, mientras piensan que proyectan su mente con el sonido de la misma, sienten como si su mente se fuese con el sonido, o como una especie de pequeño mareo, o una vibración muy especial que afecta a todo su organismo, no se preocupen, es absolutamente normal, eso quiere decir que el cuerpo psíquico se siente liberado de la prisión material y empieza a adquirir control de las percepciones.
Este ejercicio es necesario que lo hagan varias veces durante una semana.
EJERCICIO Nº 3:
Este ejercicio es conveniente realizarlo después de haber hecho varias veces el anterior.
Se procederá exactamente como en el caso anterior, o sea, sentándose en un ambiente armonioso, hacer un período de relajación con el avivamiento de la consciencia, hacer las respiraciones pronunciando la vocal A, y una vez terminadas dichas respiraciones, tomen aire, pronuncien la vocal A mientras sueltan el aire, y piensen que se consciencia se proyecta hacia afuera por todo su cuerpo al mismo tiempo, es como si eclosionaran su ser hacia afuera, expandiéndose por todas partes al mismo tiempo, y se extendiese por todo el universo como una esfera de energía y de consciencia que crece más y más.
Deberán pronunciar la vocal A, siguiendo estas instrucciones, un total de siete veces.
Es conveniente realizar, también, este ejercicio de proyección de la consciencia, varias veces durante la semana.
Es importante que comprendan que el desarrollo de la facultad de proyectar la consciencia debe hacerse en forma progresiva y natural; no intenten forzar el proceso ni ir más rápido de lo que es preciso, por eso ESTOS EJERCICIOS NO DEBEN HACERSE, BAJO NINGÚN CONCEPTO, MAS DE UNA VEZ AL DIA.
El siguiente ejercicio tiene como objeto el que puedan sentir algunos de los efectos de sus proyecciones de consciencia.
EJERCICIO Nº 4:
Es conveniente que para la ejecución de este experimento se encuentren en un ambiente de relajación y sosiego como en los experimentos anteriores, pero no es estrictamente necesario que tengan las luces apagadas, de hecho pueden tenerlas encendidas porque así podrán ver los objetos con los que experimentarán.
Como en los casos anteriores procederán a un ejercicio de relajación física y de sosiego mental, para que se encuentren cómodos y acondicionados para el experimento.
Hagan tres respiraciones profundas, manteniendo el aire en sus pulmones tanto tiempo como les sea cómodo. Cuando hagan las respiraciones es conveniente que lo hagan por la nariz, lentamente, sintiendo como el aire pasa por los caños de la nariz y llega a los pulmones; después de un momento de retención del aire, suelten el mismo por la nariz, lentamente, sintiendo como sale de sus pulmones, pasa por la tráquea, y sale por los caños de la nariz.
Fíjense en un objeto, que puede ser las cortinas de la habitación, o un mueble o un objeto que les llame la atención. Cuando lo hayan elegido, tomen una respiración profunda, suavemente, como se indicó anteriormente, y cuando suelten el aire piensen que su mente se proyecta con su respiración, que llega hasta el objeto y que lo toca.
Cuando sientan que tocan el objeto no sentirán que lo hacen con las manos, sino como una sensación única de tacto; sientan como tocan mentalmente el objeto y aprecien las sensaciones que captan.
Ese proceso lo harán durante un momento, hasta que sientan el tacto del objeto que eligieron. Luego vayan al objeto y tóquenlo con las manos, sentirán que la sensación de tacto que tenían cuando proyectaban su mente al objeto es igual que cuando lo tocaban con sus manos, pero más suave, más sutil; incluso es posible que mentalmente puedan apreciar más detalles que cuando lo tocan efectivamente con la mano.
Todos estos experimentos es necesario repetirlos durante la semana, para que, luego se pueda seguir avanzando.
Tengan en cuenta que cuando se dice que piensen que su mente se proyecta con el sonido o con la respiración, lo que se está haciendo es tratar de definir un concepto de acuerdo con nuestros esquemas actuales mentales, pero que, en realidad, lo que hace nuestra mente es tomar consciencia de una condición que se encuentra en sí misma, ya que la mente abarca todo el universo.
Es necesario, para que dichas proyecciones de la consciencia nos sean útiles, que tengamos control sobre ellas y sepamos dirigirlas adecuadamente.
La facultad de proyectar la consciencia es común a todos los seres humanos, y todos la realizan con una relativa frecuencia, pero no se dan cuenta de lo que están haciendo, ni saben que aquello es, además de una facultad natural, algo de una utilidad inconmensurable.
Veamos varias situaciones en las que proyectamos nuestra consciencia, tanto en el tiempo como en el espacio, sin darnos cuenta, excepto si lo sabemos, que lo que verdaderamente estamos haciendo es proyectar la consciencia hacia unas condiciones especiales y particulares.
Ha habido ciertos compositores de música, sobre todo de tipo culto, que han sabido captar el espíritu de los pueblos y han hecho composiciones musicales en las cuales han reflejado dicho espíritu. Por ejemplo: Smetana en su composición musical "Moldau" refleja el espíritu húngaro de mediados del siglo pasado, Falla y Granados supieron recoger el espíritu español en sus composiciones; Dvorak recogió el espíritu de América en su composición "Sinfonía del nuevo mundo", y así sucesivamente.
Muchos de nosotros, al oír y disfrutar con la música de la Sinfonía del Nuevo Mundo nos hemos "transportado", nos hemos PROYECTADO a la grandiosidad de las praderas americanas, a sus selvas y sus cordilleras, como si las recorriésemos a vuelo de pájaro; nos hemos sentido ALLI, en una tierra virgen y poderosa, llena de vigor, antes de su descubrimiento, y hemos sentido la emoción de los exploradores que se adentraron en esas tierras por descubrir y las contemplaron en todo su esplendor por primera vez.
¿Qué es lo que sucede cuando nos "sintonizamos" con esa música, y con otras como las que hemos citado, o las que reflejan el espíritu de los pueblos? Lo que sucede es que hemos PROYECTADO NUESTRA CONSCIENCIA hacia el espíritu que supieron captar y reflejar dichos compositores.
Cuando estamos dormidos y "soñamos" que estamos en una ciudad donde nunca antes hemos estado, o en un tiempo pasado o futuro, y sentimos la sensación "real" de estar en ese lugar que, sorprendentemente, muchas veces vemos, cuando estamos despiertos, que existe y que corresponde a lo que hemos soñado, estamos PROYECTANDO NUESTRA CONSCIENCIA en el mismo.
Todo esto que hemos relatado lo VIVEN todas las personas, pero la inmensa mayoría, que no saben lo que se ha operado en su mente, piensan que son solo "imaginaciones", "emociones" o "sueños".
Tengan presente los conceptos de SINTONIZAR y VIVIR la situación, y para que eso se produzca SIEMPRE entra en escena la VISUALIZACIÓN de la condición, el tiempo, o el espacio en el que hemos proyectado nuestra consciencia.
Según los principios esotéricos y metafísicos más elevados, la EFECTIVIDAD DEL MUNDO LA CONVERTIMOS EN UNA REALIDAD EN NUESTRA MENTE. Eso quiere decir que el mundo, tal y como lo percibimos ES COMO LO CONSTRUIMOS EN NUESTRA MENTE.
El tiempo, en cuanto al concepto de duración de la consciencia del mismo, NO ES UNA EFECTIVIDAD sino que es UNA REALIDAD DE LA MENTE; dicho de otra manera: el tiempo ES RELATIVO A NUESTRA CONSCIENCIA DEL MISMO y en el mundo de la unidad absoluta, en el mundo espiritual, el tiempo es una unidad en la que se conjugan, "en un eterno presente", el pasado, el presente y el futuro.
En el mundo de la Realidad Absoluta, en el mundo espiritual, el pasado, el presente y el futuro son solamente distintas coordenadas de una misma condición, y el sentimiento del pasado, el presente o el futuro, son solamente la SINTONIZACIÓN DE NUESTRA MENTE CON UNA DE ES TAS COORDENADAS PARTICULARES.
Exactamente podemos decir lo mismo del espacio, por lo que para un esoterista, conocedor de las leyes cósmicas universales, la captación de un TIEMPO PARTICULAR, o de un ESPACIO PARTICULAR, depende de la sintonización, o de la PROYECCIÓN de nuestra consciencia en ese tiempo o espacio en concreto.
Mediten mucho y bien lo que vamos a decir ahora:
"La proyección de la consciencia no consiste en ir mentalmente a un tiempo o espacio determinado; la proyección de la consciencia consiste en darse cuenta que "YA" estamos allí.
Este concepto es tan importante para la buena comprensión y para el desarrollo de la facultad de la proyección de la consciencia y está tan relacionada con otras muchas leyes ocultas del universo, que es muy importante, repasarla y meditarla varias veces para tener una comprensión, al menos fundamental, de los aspectos en ella estudiados.
Una de las cuestiones que uno se plantea es la de saber a dónde podemos proyectarnos y hasta dónde alcanza nuestra proyección, y debemos saber que una persona puede proyectar su consciencia a donde quiera y quepo hay límite de distancias para ello.
La única limitación que podemos tener en cuanto a la capacidad de proyección de la consciencia es la limitación que nosotros mismos pongamos a nuestra mente. Nuestra consciencia se puede proyectar a cualquier momento del pasado, del presente y del futuro y, por supuesto, a cualquier lugar, no sólo de nuestro planeta sino de todo el universo.
Nuestro Ser, y la mente del mismo, están conectados al Todo y pueden sentir todo como una única realidad. Todas las vibraciones del universo se interpenetran, todos los planos se unen, todas las condiciones están concentradas en un punto, y en todos los lugares al mismo tiempo, siendo nuestra mente la que les asigna dimensión; siendo nosotros los que construimos nuestro mundo, pero debemos comenzar a romper las cadenas limitadoras de nuestra mente para "elevando nuestro espíritu conocer los misterios del universo
Para proyectar nuestra consciencia es necesario empezar por saber que YA ESTAMOS ALLÍ, lo que quiere decir que nuestro Ser, que es infinito, porque es parte de la divinidad, se encuentra allí donde ésta se halle, y que la mente, como su atributo para manifestarse, se encuentra también en todas partes.
La proyección consiste en SER CONSCIENTES de que ya nos encontramos allí; de ser conscientes de las condiciones hay allí donde ponemos nuestra consciencia.
¿Cómo podemos proyectar nuestra consciencia, a voluntad, allí donde queremos? La respuesta es: por medio de la visualización.
La visualización es algo más que la simple imaginación, ya que la visualización es hacer, y sentir en nuestra mente, que aquello que hemos imaginado es algo más que un cuadro mental, que es algo real.
Por medio de la visualización "sintonizamos" con aquello que vemos en nuestra mente.
Pongamos un ejemplo sencillo: Imaginemos que queremos llamar por teléfono a un amigo: para que la llamada se produzca no es suficiente que sepamos el número, sino que es necesario que marquemos el número para que, si hay línea, podamos comunicarnos con él.
Aquí se nos plantean dos cuestiones muy importantes, verdaderamente fundamentales en el tema de la proyección de la consciencia, y son: 1) Sintonizar marcando el número de teléfono y 2) Si hay línea, después de marcar, habrá comunicación.
La sintonización se consigue por medio de la visualización; no tiene ningún límite porque podemos marcar la frecuencia que deseemos para poder sintonizar, pero para poder sintonizar es necesario que la "línea de contacto" esté abierta. ¿Qué quiere decir esto?
En muchas ocasiones surge la pregunta de si una persona puede proyectar su consciencia donde se encuentra otro individuo, violando así su intimidad. La respuesta es que NADIE puede proyectar su consciencia allí donde haya una persona que se encuentre en una situación considerada íntima.
De la misma manera que todos, sin excepción, tenemos la facultad de proyectar nuestra consciencia, también todos, sin excepción, cuando se encuentran en una situación que consideran privada o íntima, crean un campo protector, o un escudo psíquico, que impide que nadie pueda traspasarlo y "ver" aquello que no quisieran que se percibiese por alguien ajeno.
Muchos creen que los escudos psíquicos solamente los pueden crear las personas que están muy evolucionadas, mientras que aquellas que no tienen un cierto grado de entonamiento y de conocimiento de las leyes cósmicas se encuentran desprotegidas, sin embargo sabemos perfectamente que contamos con escudos protectores de la Llama Azul y otros tipos de protección enseñados durante el curso de metafísica.
Por lo tanto podemos estar tranquilos en cuanto a que ningún "espíritu" nos pueda molestar o visitar, o que, por supuesto, nadie pueda, por medio de la proyección de la consciencia, percibir algo que nosotros no quisiéramos que lo fuera y, por supuesto, que nosotros tampoco podemos contactar con nadie por medio de la proyección de la consciencia, si esa persona se encuentra en una situación íntima.
La proyección de la consciencia puede ser controlada por medio de una sintonización adecuada de nuestra consciencia con las condiciones, lugar, tiempo, o persona que queramos contactar.
Esa sintonización se produce por medio de la VISUALIZACIÓN, que es, como indicábamos en un ejemplo anterior, como el número telefónico que marcamos para comunicarnos con alguien por medio del teléfono.
Al hacer la proyección de nuestra consciencia, ésta lleva consigo las características de NUESTRA PERSONALIDAD, la cual se puede hacer notar y reconocer en la medida en que la proyección haya sido más perfecta, o en la medida en que sepamos sintonizar con la persona o personas con las que queramos contactar en nuestra proyección.
¿Qué quiere decir esto? En muchas ocasiones, después de una experiencia de proyección de la consciencia, que había sido controlada para contactar con una persona, ésta ha declarado que sentía como si la otra persona, aunque era invisible a sus ojos, se encontrase allí y que le observaba; pero no solamente percibía que "habla" alguien, sino que incluso "tenía la sensación" que ese alguien era precisamente la persona que estaba haciendo la proyección; dicho de otra manera: había "reconocido" a la persona que se había proyectado.
Ese es el sentimiento que suelen tener las personas que están despiertas cuando reciben una proyección de consciencia, enviada hacia ellos, cuando esas personas no habían alcanzado aún un cierto grado de desarrollo psíquico.
Sin embargo, cuando la persona ha alcanzado un cierto grado de evolución espiritual, y en otros casos particulares en los que la proyección, por razones muy importantes ha sido muy fuerte, se puede ver a la persona que se ha proyectado como si fuese una figura transparente, pudiendo escuchar, incluso, aquello que se les quiere transmitir en dicha proyección de la consciencia.
A continuación se dará un ejercicio para aprender la manera como podemos proyectar nuestra consciencia a voluntad, con control sobre las mismas, y cómo podemos percibir a través de las mismas:
EJERCICIO Nº 5:
Para hacer este experimento deberán elegir un lugar al cual proyectar su consciencia, recomendando que las primeras veces sea un lugar que conozca bien, para que su visualización sea más fácil. Ese lugar puede ser una casa, un templo, una ciudad, o un lugar en el campo, etc.
Cuando se encuentren preparados retírense a un lugar tranquilo, comiencen relajando el cuerpo y sosegando su mente; una vez conseguido empiecen un avivamiento de la consciencia celular; comenzando a concentrarse por los pies y siguiendo, progresivamente, por todo el cuerpo hasta la cabeza.
Cuando hayan acabado el avivamiento de la consciencia, comiencen a hacerlo de nuevo, pero esta vez más rápido; siempre deben comenzar concentrándose por los pies y subiendo luego en su concentración por todo el cuerpo. Luego de terminado este segundo avivamiento, comenzar de nuevo, pero más rápido, siempre desde los pies a la cabeza.
Luego de terminar el tercer avivamiento, hacer varios avivamientos de la consciencia más, pero de una forma muy rápida, como si fuese un torbellino mental que comienza por los pies y termina por la cabeza; procuren no pasar de siete veces en ese avivamiento rapidísimo. Al final sentirán un cosquilleo por todo el cuerpo, o como una sensación de ligero mareo. No se preocupen porque es parte del proceso.
Tomen una respiración profunda, mantengan el aire en sus pulmones mientras visualizan el lugar a donde quieren proyectar su consciencia y, cuando estén preparados, suelten el aire mientras cantan suavemente la vocal AAAAAA. Al soltar el aire y pronunciar la vocal, piensen que su consciencia se proyecta al lugar donde quieren estar.
Muchas veces, al hacer esto, se siente como si algo se desprendiera de nosotros y se alejara, yendo hacia donde queremos sentir nuestra proyección. Al hacerlo así sentirán que se encuentran en el lugar elegido; que lo ven y que lo sienten realmente.
A veces lo que se siente parece que está fuera de lugar, que no corresponde a lo que nosotros esperábamos, o que lo sentimos de una manera algo rara. Eso es porque aún no nos hemos acostumbrado a proyectar nuestra consciencia, o porque hay nuevos elementos que nosotros desconocíamos en el lugar que elegimos para nuestra proyección, o que falta alguna cosa de aquel lugar y que nosotros no sabíamos que había sido retirada previamente.
Poco a poco, en la medida en la que vayan haciendo este experimento verán que tienen control total sobre él, no sólo en cuanto a que nuestra consciencia se proyecta a dónde y cuándo nosotros queremos, sino también en cuanto a la percepción de las sensaciones que podamos captar durante la experiencia.
Este ejercicio es conveniente realizarlo durante toda una semana, pero NO se debería realizar más de una vez al día.
Una de las cosas a tener en cuenta en las experiencias de proyección, es que aquello que se percibe se capta como una unidad; eso quiere decir que la proyección de la consciencia capta la situación, la vibración y los estados particulares que se manifiestan en el lugar y en el tiempo al que se ha proyectado la consciencia como un todo unificado y no como una separación de las diferentes partes que componen ese todo.
Nosotros estamos acostumbrados, por efecto de utilizar habitualmente solo los sentidos de percepción física, a tener la sensación de la vista, oído, olfato, gusto, y tacto como algo separado que podemos clasificar en nuestra percepción; sin embargo, en las sensaciones que tenemos cuando se efectúa una proyección de la consciencia, esos sentidos están unificados, es decir: que vemos oímos, olemos, gustamos, tocamos, así como otras impresiones internas, como si estuviesen todas juntas.
Para que se comprenda mejor esto que les estamos explicando vamos a relatarles el resultado de una proyección de la consciencia en la que la persona A se puso de acuerdo con la persona B para, a una hora determinada, hacer una proyección.
A no había estado antes en la casa de B, por lo que su percepción, si era correcta, no podría ser fruto de lo que ya conocía anteriormente.
Cuando, al día siguiente de realizar el experimento, A hizo una descripción de lo que había percibido; al describir la habitación donde se encontraba B, le dijo que veía en una pared dos cuadros, los cuales fueron detalladamente descritos por A.
B le dijo a A que en aquella habitación había un solo cuadro, el cual coincidía con la descripción que había hecho de uno de los mismos, pero no había ningún otro más que aquel.
Cuando A fue a visitar a B a la casa donde había hecho la proyección, al llegar al salón vio que en la pared donde estaba la puerta que comunicaba con la habitación de B estaba el cuadro que había descrito, pero que B le indicó que no se encontraba en la habitación.
- A le comentó a B: ese es uno de los dos cuadros que te dije.
Al pasar a la habitación contigua, pero al otro lado de la pared, se encontraba el otro cuadro, el que B le había dicho que estaba en la habitación hacia donde se había realizado el experimento de proyección.
Era cierto que en aquella habitación había solo un cuadro, pero también era verdad que a ambos lados de la pared, uno en un cuarto, y otro en el contiguo estaban los dos cuadros que A había visto en su proyección.
Lo que había sucedido era que A en la proyección de la consciencia percibió la pared, por ambos lados a la vez, como una unidad, por lo que veía los dos cuadros juntos en la misma pared.
Este ejemplo es muy ilustrativo, para que comprendan que aquello que perciben en los experimentos de proyección es "diferente" a como se percibe con el nivel de consciencia objetivo. Tengamos en cuenta que la percepción de la percepción de la proyección se realiza en unos niveles de consciencia muy elevados, en los cuales la realidad se capta diferente a como lo hacemos con nuestros sentidos físicos.
No obstante, y en la medida en que nos vamos perfeccionando en la facultad de la proyección de la consciencia, aprendemos a interpretar mejor las sensaciones que percibimos por lo que, llegado el momento, se puede determinar cada cosa en su lugar y en el tiempo que le corresponde.
Con esta enseñanza hemos aprendido algo muy importante que tendrá gran influencia en el desarrollo de las facultades divinas en nuestro interior, así como en el conocimiento de los planos espirituales, su influencia en la vida, y el acceso a dichos planos, de manera consciente, ya que aspiramos al conocimiento interior, y ese algo tan importante es que PODEMOS LIBERAR NUESTRO SER DE LAS ATADURAS MENTALES, que podemos hacer que nuestra consciencia, tanto tiempo aprisionada en el cuerpo material por nuestro desconocimiento, pueda ir más allá de las ataduras mortales y captar el infinito en toda su plenitud.
CICLOS DE MANIFESTACIÓN Y DE LA VIDA
Debemos comprender que cualquier cosa, incluso la más insignificante, obedece a ciertos ciclos de manifestación y si, además nosotros intervenimos directamente en ella, también nosotros, que tenemos nuestros propios ciclos, tales como el nacimiento, crecimiento, creatividad, etc., influiremos con nuestros ciclos en la misma.
Por ello vamos a estudiar los fundamentos generales de los ciclos de manifestación, así como los ciclos que corresponden a las personas, indicándoles como nos afectan "PERSONALMENTE" y cuál es la manera de aprovecharlos.
Dicho de otra manera: aprenderemos de las fuerzas del Universo y de sus ciclos para que, por medio de nuestro conocimiento, podamos utilizar esa fuerza especial en nuestro beneficio. Es como si nos encontrásemos ante el mar, sabiendo el horario y la intensidad de las mareas; nosotros no podemos anular las mareas, ni las fuerzas de las olas, pero podemos aprovecharla para que su energía nos sea útil en el tiempo y condición en las que ésta se produce.
Cada uno de nosotros posee lo que llamaríamos un "reloj biológico" que nos indica cuáles son las horas de comer, de dormir, estar despierto, etc., y al viajar a un sitio en el que hay varias horas de diferencia, uno se encuentran con que sus hábitos deben volverse a regularizar para llevar una vida normal. Se calcula que una persona tarda en acostumbrarse al nuevo lugar un día por cada hora de diferencia entre el lugar al que hemos llegado y el de nuestra procedencia.
A raíz de nuestros estudios sabemos que lo que científicamente se llama "reloj biológico" no es otra cosa que la programación horaria que cada uno tiene en su subconsciente y que debemos adaptar cuando viajamos a largas distancias en poco tiempo, o cuando cambiamos nuestro turno de trabajo o los hábitos de nuestra vida.
Tanto cuando nos encontramos en el plano material, como cuando hemos pasado al plano espiritual, después del tránsito de la consciencia, nuestras vidas y nuestro Ser, se rigen por medio de ciclos muy precisos que marcan nuestra manifestación.
Ahora estudiaremos la Ley de los Ciclos, en su manifestación fundamental, y procederemos a aplicar este conocimiento, de manera muy práctica, en nuestra vida habitual.
Si hacemos un análisis analógico entre los períodos, o puntos, que corresponden a un ciclo simple, los planetas, y el día de semana, veremos que hay una relación evidente que, si aplicamos a las actividades que cada uno de nosotros desempeña a lo largo de la semana, supone un aprovechamiento eficaz de nuestras capacidades y energías para mejorar en nuestras vidas diarias; veamos pues, cuáles son esas correspondencias:
1) Sol Domingo Germen de las cosas
2) Luna Lunes Razonamiento y emoción
3) Marte Martes Creación y acción
4) Mercurio Miércoles Realización activa, expansión de las ideas, buena base.
5) Júpiter Jueves Dominio, poder de ejecución, justicia y efectos kármicos
6) Venus Viernes Plenitud, recogida de los frutos, concepción
7) Saturno Sábado Descanso, involución, destrucción
Naturalmente que cada una de estas características están condensadas en este diagrama, pero conviene saberlo para poder relacionarlo en todo momento con cuál es la línea de acción a seguir, en el caso de la aplicación de los ciclos semanales a nuestra vida diaria.
Por supuesto que, cuando hablamos de los días de la semana, y su relación con los períodos del día simple, no queremos decir que sea para todos por igual, ya que cada persona es diferente, y no será igual para todos la influencia que se reciba un domingo, un martes o un jueves de la semana
El ciclo simple de manifestación, con referencia a una semana, puede ser aplicado en nuestra vida diaria para determinar cuáles son los días más favorables, dentro de la misma, para poder ejecutar tal o cual cosa.
Naturalmente que todos y cada uno de nosotros tenemos nuestra vida planificada de acuerdo con nuestro trabajo, nuestras obligaciones y las posibilidades reales de acción, pero fuera de eso todos podemos, en el caso de enfrentarnos a cuestiones importantes, determinar, por efecto de la acción del ciclo simple, en el período de una semana, cuál es el momento más favorable para algo que no interese en particular.
Aunque cada día de la semana está relacionado no solamente con un punto del ciclo simple, sino también con un planeta, es conveniente que recordemos que los ciclos se aplican a nosotros de una manera personal de acuerdo a cuál es el día de la semana que corresponde a nosotros y para ello simplemente basta saber qué día de la semana es el en que hemos nacido.
El día de la semana en que hemos nacido será para nosotros nuestro DIA SOLAR. De tal manera que en el caso de que una persona haya nacido un jueves, entonces para ella su DIA SOLAR es el jueves, y de acuerdo con la tabla que se indica a continuación los otros días serían como sigue:
DIA DE NACIMIENTO DIA DEL CICLO PERSONAL
Jueves Domingo
Viernes Lunes
Sábado Martes
Domingo Miércoles
Lunes Jueves
Martes Viernes
Miércoles Sábado
Dicho de otra manera, cada uno de nosotros tiene, en cuanto a la influencia de los ciclos de manifestación, y particularmente del ciclo simple, ciertos días que son afectados por el Sol, la Luna, Marte, etc.
Veamos pues cuáles son las particularidades, o los momentos favorables, en cada uno de los periodos, o días de la semana, aplicando lo a nosotros personalmente:
PRIMER PERIODO o nuestro domingo particular: Este período es particularmente importante en nuestra vida ya que, durante ese día, recibimos las fuerzas vivificadoras y vitales con mayor fuerza que cualquier otro de la semana.
Es un período en el que podemos armonizarnos especialmente con si las fuerzas naturales del cosmos y se recomienda que ese día, si posible, permanezcan al menos siete minutos dejando que el Sol bañe con su luz nuestra cara, con los ojos cerrados y nuestros brazos y antebrazos.
Es sumamente favorable para meditar y armonizarnos con nuestro Ser Interior y captar ideas intuitivas, como así también que nuestras ideas creadoras están muy activas, de tal manera que si queremos pensar en algún proyecto en concreto, veremos que captamos mejor los detalles del mismo.
En este día nuestra capacidad para hacer creaciones mentales está especialmente desarrollado y tenemos más fuerza en cuanto a nuestra creatividad mental, y también es día muy bueno para pensar pero no para actuar, ya que nuestras fuerzas están más encaminadas a la creatividad y entonamiento mental y espiritual.
SEGUNDO PERIODO o lunes particular: Este día está especialmente indicado para planificar mentalmente aquello que queremos realizar.
Este es un período eminentemente lógico, por lo que las planificaciones que ideemos en el mismo, y que estén relacionadas con el proyecto que originalmente hemos concebido en nuestra mente, serán más detalladas y completas.
Podríamos decir que este período es el mejor indicado para PENSAR.
TERCER PERIODO o martes particular: Especialmente indicado para expresar, o para comunicar, aquello que hemos concebido en el primer período y planificado en el segundo.
Este es un día especialmente adecuado para comunicar nuestras ideas y proyectos a los demás; para hacer transacciones legales, establecer conversaciones de negocios, escribir cartas a otras personas o instituciones, dar charlas o conferencias, etc.
CUARTO PERIODO o miércoles particular: Este es un período muy eficaz para comenzar cualquier tarea física, para poner en marcha, de forma efectiva, aquello que deseamos hacer.
Es un período de gran realización dentro del mundo material y es un día en el que sentimos de manera particular que hay una armonía, o debería haberla entre el mundo mental y el material. Nos encontramos pletóricos de energía, presta para ayudarnos e impulsar nuestras acciones hacia su realización. También es un día fantástico para realizar deportes o entrenamientos.
QUINTO PERIODO o jueves particular: Es apropiado para poner en acción nuestro poder interior y exterior. Sentiremos que aquello que estamos haciendo tiene fuerza y tiende a realizarse.
Sentimos que, verdaderamente, aquello que hemos emprendido, si se adecua a la Ley Cósmica, está bien cimentado y tiene fuerza para realizarse., pero si no hemos seguido adecuadamente los pasos de creación planificación, transacción, y puesta en movimiento activo, veremos que en este período el proyecto que hayamos puesto en marcha tiende a derrumbarse.
Es un día verdaderamente crítico, ya que nuestra fuerza y nuestra acción sobre lo que estemos haciendo tenderán a darle empuje y fuerza, si los pasos anteriores fueron bien ejecutados, o a desmoronarse, en el caso de no haber hecho las cosas de acuerdo con la Ley Cósmica. Es un período de compensación.
SEXTO PERIODO o viernes particular: Es especialmente indicado para recoger la cosecha de aquello que hemos emprendido. Hay que hacer lo posible para ponernos en contacto con las personas o entidades que hayan de bonificarnos por el trabajo realizado.
Este período es activo, en el que hay que recoger, pero para ello hay que moverse.
SÉPTIMO PERIODO o sábado particular: Es un período de ajuste y de descanso. Es conveniente, dentro de lo posible, dejar este día para descansar, o descansar lo más posible porque en el mismo todo está en disolución.
En este período las capacidades creativas, generativas o activas, están bajo mínimos, por lo que es conveniente no emprender ningún proyecto que, por estar bajo de energía impulsadora, tendrá menos fuerza para manifestarse. Normalmente nos sentimos más cansados, no sólo físicamente, sino también mental y espiritualmente, y corresponde al reajuste interno y externo, que todos nosotros necesitamos antes de comenzar un nuevo ciclo.
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